Al Río Rey
Río Sella,
quién pudiera pasar siempre
hacia su propio destino
sin parar.
Quién fuera tan transparente
un día y la vida entera
sin cansar,
y atravesara los años
manso y ajeno a la muerte
sin edad.
Río Sella
¿qué siente el agua
cuando se moja en los pliegues
de la mar,
qué nos murmuras,
qué expresas
con ese idioma corriente
de humedad?
¿Cómo mirarán las cuencas de tus ojos
nuestra existencia de tiempo,
carne, tierra y nada más?
Son tantos nuestros afanes
para tan corto trayecto
y tan constante tu curso
para tanta eternidad.
Quién pudiera, Río Sella
nacer siempre y pasar siempre
por donde siempre y jamás.
Transcurrir siempre y por siempre
y nunca
sin dejar de ser el mismo
ser igual.